La idea original de crear una producción cuyo guión estuviera pasado en el fenómeno universal de la inmigración surge como una necesidad de expresión ante un tema de tan amplio calado social como es la inmigración en la actualidad. Sobre todo porque estos fenómenos sociales muestran un grado de aceleración y de convulsión que muchas veces superan la capacidad de respuesta de las propias sociedades, generandose así tensiones y conflictos que terminan con el levantamiento de los muros invisibles de la intolerancia. Por tanto, desde el ámbito cultural, entendido como vanguardia y vehículo de expresión, hemos querido ofrecer una mirada amplia sobre el fenómenos de la inmigración, al mismo tiempo que hemos querido extender el concepto de cultura hasta llegar a las generosas orillas de la tolerancia.
Inmigración es eso, una mirada particular sobre un fenómeno universal que intenta ofrecer desde la plasticidad de las artes escénicas una visión integradora del fenómeno de la inmigración, acudiendo a las experiencias de nuestra propia historia como pueblo emigrante y a la exaltación del mestizaje cultural entre los pueblos. Y todo ello desde el basamento de un arte mestizo, como es el flamenco, que se utiliza ahora como vehículo expresivo en el propio contexto geográfico y cultural andaluz del que nace. Expresiones y lenguajes propios para mensajes universales. Este mestizaje se refleja en la propia estructura artística de la Compañía que representa Inmigración, en la que entremezclan artistas de diferentes nacionalidades, con experiencias culturas, vivencias miradas y formas de afrontar la vida distintas. El arte y la cultura como manifiestos de una realidad posible en la que el respeto mutuo, la convivencia y la tolerancia caminan unidas de la mano. Con estas intenciones y compromisos nace Inmigración.